¿Cuándo nos tenemos que vacunar?


 ¿Cuándo nos tenemos que vacunar?


“Es muy importante que tanto los niños como los adultos conservemos nuestro carné de vacunación actualizado”

Las autoridades sanitarias clasifican las vacunas en “sistemáticas” y “no sistemáticas”.

Las vacunas sistemáticas son las que están indicadas para toda la población, a partir de l’edad infantil, y en Cataluña se aplican de acuerdo con el Calendario de vacunaciones sistemáticas, que se puede consultar en este enlaze.

Durante la edad adulta, nos tenemos que vacunar en las siguientes situaciones:
  • si durante la infancia no recibimos ninguna vacuna porque aún no estaba disponible (por ejemplo la vacuna contra l’hepatitis A, si no hemos estado en contacto con el virus y no tenemos anticuerpos; por ejemplo las mujeres en edad fértil que tengan la intención de quedar embarazadas han de vacunar-se contra la rubéola en caso que no les vacunasen durante la infancia)
  • si se necesita alguna dosis de recuerdo (por ejemplo la de la vacuna contra el tétanos)
  • determinados grupos de población se tienen que vacunar contra la gripe (ver punto “8.¿Qué personas y cuando se tiene que vacunar contra la gripe?”)

Las vacunas no sistemáticas no están incluidas en el calendario de vacunaciones y sólo se aconsejan a ciertas personas (niños o adultos) o a grupos de población que se encuentran en circunstancias concretes que les hace más vulnerables a determinadas infecciones. Por ejemplo, trabajadores de escuelas o centres sanitarios, viajeros, etc.

http://www.doctoraboitiz.com/pediatria/36-articulos-de-pediatria/115-virus-o-bacterias.html

¿Por qué son tan importantes las vacunas ?




“Cada vez menos personas padecen enfermedades infecciosas graves gracias a las vacunas”

Gracias a las vacunas, se han podido erradicar muchas enfermedades infecciosas que años atrás producían grandes epidemias y muertes, como por ejemplo la viruela. En el caso de otras enfermedades, como el sarampión o la poliomielitis, aunque no se ha conseguido erradicarlas del todo se ha reducido mucho el número de casos.
Si no vacunásemos, estas enfermedades podrían volver a extenderse entre la población.

¿Qué son las vacunas?

“Una vacuna es un medicamento que proporciona protección contra futuras infecciones”

Una vacuna es un medicamento que se obtiene a partir de un microorganismo. Cuando se administra a una persona sana, hace que su cuerpo produzca defensas contra éste. Si en un futuro esta persona entrase en contacto con el microorganismo contra el cual ha estado vacunada, las defensas lo protegerían y no padecería la enfermedad.

La mayoría de vacunas protegen versus una enfermedad concreta, pero también hay otras de combinadas que protegen de más de una enfermedad, como es el caso de la vacuna triple vírica (sarampión, parotiditis y rubéola) o la vacuna DTP (difteria, tétanos y tos ferina).

Virus mas conocidos

Los virus más conocidos de todos son los fagos, debido a la gran facilidad técnica del cultivo de bacterias, comparado con el cultivo de tejidos o embriones. Su ciclo vital es el siguiente: la partícula del fago se fija en determinados puntos de la pared de la bacteria y la molécula de ácido nucleico, junto con algunas proteínas enzimáticas, es inyectada dentro de la bacteria y queda fuera la cápsula proteica vacía. Después de esta penetración, la célula infectada deja de producir sus proteínas y se pone a fabricar las del fago, que, de ese modo, va haciendo copias de su ácido nucleico y de las subunidades proteicas de la cápsula, que se reúnen para constituir las partículas completas; cuando éstas se han acumulado en un cierto número, la bacteria se rompe y libera los virus, que van a infectar las células próximas.

                                 Virologia

Los hechos más sobresalientes que han motivado el rápido desarrollo de la virología, la parte de la microbiología que tiene por objeto el desarrollo de los virus, son: en la última década del siglo pasado, Ivanovsky primeramente y después Beijerinck descubrieron la existencia de agentes infectivos, más pequeños que las bacterias hasta entonces conocidas, a los que hoy se denominan virus; en el año 1.931, Elford consiguió medir las dimensiones de los virus; Roux hizo el primer intento de cultivo de virus; y Goodpasture lo obtuvo en huevos fecundados, es, decir, con embrión de pollo; Max Theiler consiguió la primera vacuna contra la fiebre amarilla del mono, practicando inoculaciones sucesivas de su virus en ratones y cultivando después el producto en embriones de pollo, y, encontrado en el camino, se han preparado otras vacunas contra el cólera porcino, el moquillo y la rabia del perro, etc.; en 1.935, Stanley cristalizó el virus del mosaico del tabaco; Williams fotografió por primera vez un virus, por medio del microscopio electrónico; en 1.949, Enders, Robinson y Willer cultivaron el virus poliomielítico; Coons demostró la situación de las partículas víricas en las diferentes partes de la célula, mediando la técnica de los anticuerpos fluorescentes; Fraenkel-Conrat y Williams fraccionaron el virus en una parte proteica y en ácido nucleico y demostraron que, separadamente, no poseen infectividad; y Gierer y Scharamm pusieron de manifiesto que la infectividad de ciertos virus es debida al ácido nucleico. En el año 1.957, Isaacs descubrió el interferón.


                Tipos de virus


Según su forma, se distinguen los siguientes tipos de virus: icosaédricos, como el virus de la poliomielitis; helicoidales, como el virus del mosaico del tabaco; bacteriófagos, que sólo infectan a las células bacterianas; y virus con envoltura, como el de la viruela, el del sida o el de la gripe. Los icosaédricos, como dice su nombre, tienen forma de un icosaedro. Los helicoidales son de forma cilíndrica. Los bacteriófagos son el nombre particular de ciertos virus que transportan una partícula genética de una célula bacteriana a otra. Descubiertos por D'Herelle en 1.915, se obtienen mediando filtración; son específicos, es decir, que cada uno ataca solamente a una especie de bacterias; de cabeza poliédrica con ácido desoxirribonucleico en su interior, y cola anular, o bien en forma de esférula o de bastón, con una placa basal, espinas y fibras en la parte inferior. Su importancia ha decrecido con el descubrimiento de las sulfamidas y de los antibióticos. Los virus con envoltura son más o menos esféricos.

¿Qué son las vacunas?


Los virus son un reino de parásitos intracelulares obligatorios, de pequeño tamaño, de 20 a 500 milimicras, constituidos sólo por dos tipos de moléculas: un ácido nucleico y varias proteínas. El ácido nucleico, que puede ser ADN o ARN, según los tipos de virus, está envuelto por una cubierta de simetría regular de proteína, denominada cápside.
      Los huéspedes que ocupan pueden ser animales, vegetales o bacterias. Entre los microorganismos, los virus parasitan bacterias, son los bacteriófagos o fagos, pero no se conocen virus que infecten algas, hongos o protozoos. Entre los vegetales, sólo se han encontrado infecciones por virus en las plantas con flores, pero no en las plantas inferiores. Entre los animales, se conocen muchos que parasitan vertebrados, pero entre los invertebrados, sólo se han encontrado en artrópodos.
      Las enfermedades humanas, causadas por virus, más conocidas, son la poliomielitis, gripe, viruela, sarampión, fiebre amarilla, encefalitis, paperas, tracoma, etc. Actualmente se cree que algunos tumores cancerosos son también de origen vírico. Las infecciones víricas en general, no pueden ser tratadas con antibióticos; sin embarco, el interferón, producto biológico sintetizado por los tejidos invadidos por un virus, es activo contra infecciones causadas por otros.